jueves, 25 de octubre de 2007

Identidad frente a Identidad


“Así es la historia en un momento de tu vida,
Cruce de caminos, punto de partida…”
Morodo, “Yo me levanto”


He cumplido 14 años de vida y me veo envuelto en una nube de dudas y confusiones. Miro a mí alrededor y puedo ver la diversidad de estilos en la calle. Desde jóvenes pokemones a Emos. Desde Pankis ha Raperos, y así un sin fin de tribus urbanas que llaman mi atención y complican mi identidad, porque quiero ser como ellos, pero no se si ese es mi camino. Quiero experimentar sus vivencias, pero temo las consecuencias, quiero gozar de una ideología de vida, pero temo escoger la incorrecta.
Hoy se han cruzado mis caminos y se que es un punto de partida para comenzar a vivir en plenitud mi ADOLESCENCIA.

Los adolescentes forman su identidad no sólo tomando como modelos a otras personas, como lo hacen los niños más jóvenes, sino también modificando y sintetizando identificaciones anteriores a una nueva estructura psicológica, mayor que la suma de sus partes (Kroger, 1993). Para formar la identidad, los adolescentes deben determinar y organizar sus capacidades, necesidades, intereses y deseos para expresarlos luego en un contexto social (Erikson, 1968)

Es en este momento en que él adolescente busca y quiere llegar a ser alguien pero no sabe cómo, es por eso que hace ensayos que en ocasiones pueden ser mal vistos por la familia y la sociedad, provocando un gran nivel de distanciamiento entre padres e hijos, perdiendo así la comunicación afectiva. Por lo demás este conflicto provoca que los adultos olviden que estos ensayos son necesarios para que el adolescente consolide su identidad.

La adolescencia es considerada en sí misma una etapa de crisis ya que implica adaptarse a cambios físicos, psicológicos y medioambientales (familiares y extrafamiliares) pues es el momento en que "se empieza a dejar de ser niño" y esto conlleva el tener como una tarea importante en esta etapa el aceptar la pérdida de esa infancia.

El relato de Camilo expuesto anteriormente, deja en claro la crisis que enfrentan los adolescentes al entrar en una etapa de búsqueda donde juegan muchas respuestas importantes de la vida que lo impulsan a buscar nuevas alternativas: ¿por qué soy cómo soy?, ¿cuál ha sido mi experiencia?, ¿qué quiere preservar de mi historia?, ¿en que me parezco a mis padres?, ¿Qué es lo que realmente quiero conservar?...
Es en este momento es en donde aparecen modelos a los cuales parecerse; por ello las personas que los adolescentes consideran como ideales son Fundamentales, pues muchas veces pueden dejarlos marcados para siempre.

Una gran fuente de influencia para la concreción de identidad son los ESTEOROTIPOS, que se encuentran en cada segmento de la población. Escogen sus propios rasgos externos (vestido, peinado, adornos, música, et), que son la manifestación de los valores internos que como grupo quieren preservar.


Pero lamentablemente las tendencias de la moda y los fines comerciales que están detrás de éstas, son las que rigen la presentación de tales estereotipos, que vienen revestidos de formas externas “modernas”, y son retomados y aceptados por las nuevas generaciones de adolescentes. Siempre traen consigo una ideología envuelta en nuevos estilos de ropa, adornos, modales, vocabularios, que hacen que una juventud se identifique como parte de esa generación

Este seguimiento de modas estereotipadas que se da en cada generación de jóvenes, es utilizado por la publicidad y los medios de comunicación con fines comerciales, que identifican algunos rasgos de cada generación, los ponen de moda, los refuerzan y provocan, para poder vender y comercializar determinados productos.

Lo delicado de este mecanismo es el tipo y selección de valores que representan y que cada joven asimila en su proceso de identificación, pues con ellos construye los cimientos de su propia vida.

Es por esto que a manera personal cuestionamos un poco la elección o identificación de una identidad en algunos adolescentes de hoy en día, puesto que ya no es una elección por principios y valores, sino que por moda.
No significa que juzguemos a todos los jóvenes, porque una buena parte toma una vía de desarrollo de manera informada y responsable, pero nos enfocamos en aquellos que no consideran el futuro al momento de escoger un estereotipo, al buen chileno, por monos, ponen en juego el desarrollo sano y significativo que se da en esta etapa tan complicada, pero a la vez una de las más bonitas.

1 comentario:

Claudia Arancibia, Carolina Cerón, Loreto Villena. dijo...

Hola chicas!

Muy buen articulo, es más me identifiqué con lo que escribieron... creo que todos solemos pasar por este periodo... donde estamos en busca de nuestra propia identidad, vestirnos de negro, para demostrarles a los demas que somos personas aisladas, que no nos gusta la interacción con el resto... fue lo que me pasó hace pocos años atras...

Muy buen articulo, insisto!
:D

Saludos compañeras!!

Atte.

Carolina Cerón